viernes, 8 de junio de 2018

Testimonio


El pasado día 14 de abril el Señor llamó de regreso al hogar eterno al hno. Idalberto Carbonell Ramírez, uno de los más destacados líderes del ecumenismo en Santiago de Cuba.
Conocí a Beto en nuestro tiempo de estudiantes, precisamente en la reunión organizativa del Movimiento Estudiantil Cristiano (MEC) en el año 1961.  Entonces descubrí en él al líder, dinámico y entusiasta que vivenciaba un   ecumenismo práctico. Años más tarde, al volver yo a Santiago, ya Beto era dirigente laboral, no se desempeñaba en su perfil de Humanidades donde   suponíamos que estaría sirviendo,  sino en un giro fundamental de nuestra ciudad, la Empresa de Acueductos. De aquella época recuerdo el gran aprecio que Beto disfrutaba de jefes y subalternos, por su profesionalidad en el trabajo, por su carácter firme pero apacible y bondadoso. El liderazgo eclesial de Beto fue constante, dirigente de juventudes de su Iglesia, durante   muchos años fue presidente de la Junta Local llegando a ser ordenado como Diácono Oficial de la Iglesia Metodista, activo colaborador del movimiento ecuménico nacional y fue presidente nacional del MEC de Cuba.
Fue Beto uno de los hermanos/as que definidamente visualizó la organización de un trabajo ecuménico local y una de las seis personas que nos convocamos para diseñar los primeros bocetos de lo que hoy es el “Centro Cristiano de Servicio y Capacitación B.G. Lavastida” de Santiago de Cuba, al que le dedicó 21 años.  Pero su labor sobresaliente fue en el área de Ecología, donde con esforzada pasión comenzó el trabajo desde romper la indiferencia eclesial hacia el tema hasta la celebración de talleres para capacitar en el ejercicio de la responsabilidad ecológica. Trabajo también en el CIC donde fue coordinador del Programa para la Vida y en ASEL (Acción Social Evangélica Latinoamericana).
Agradecemos al Señor, en sentido personal e institucional, haber sido influenciados/as por esta vida de admirable coherencia entre su decir y su quehacer cotidiano de amor justicia y paz.


Rev. Gisela Pérez Muñiz, Directora





No hay comentarios:

Publicar un comentario